En este artículo queremos hablaros sobre la importancia de elegir bien un producto sanitario que nos hayan prescrito o que simplemente queremos adquirir por cualquier necesidad.
El mundo globalizado en el que hoy vivimos hace posible que podamos adquirir casi cualquier cosa, por muy lejos que esté, y nos la envíen a la puerta de casa en muy poco tiempo. Desde una caja de lápices hasta un coche, por ejemplo. Cuando compramos online o en una Gran Superficie sabemos que el producto tiene su garantía, podemos hacer devoluciones, cambios, etc, igual que en cualquier establecimiento a pie de calle; compramos un pack de 6 bombillas LED, lo recibimos, y si no van contactamos con el proveedor y punto. Pero, ¿qué ocurre cuando lo que estamos comprando es un producto sanitario que según la legislación debe ser adaptado por un profesional cualificado?
Cualquier persona puede teclear en internet “zapato postquirúrgico”, “muñequera para tenosinovitis De Quervain”, “bota tipo Walker”,… Obtendrá cientos de resultados donde podrá comprar a cuál de ellos más barato, y por supuesto que cada uno tiene la libertad de comprar donde quiera, faltaría más. Lo que queremos informar es que un producto sanitario debe ser seleccionado y adaptado por un profesional sanitario cualificado, veamos por qué.
Pongamos como ejemplo una simple muñequera para el síndrome del túnel carpiano. Hay muchos modelos de distintos fabricantes, todos aptos para tratar esta patología, pero si no tenemos en cuenta la fisiología del paciente que la va a utilizar nos encontraremos que muchos de esos modelos le van a resultar incómodos, bien por la posición de las cinchas, o porque el paciente tenga el hueso del cúbito en la muñeca muy prominente, por el propio tejido de la ortesis…. Además, estas muñequeras vienen con una pletina de duraluminio maleable, conformada en una posición estándar por el fabricante, pero que en la adaptación final debe ser ajustada por el técnico a la propia forma de la mano del paciente.
Además de las ortesis, ocurre también con sillas de ruedas, andadores, muletas, … El mejor sitio donde obtener el mejor asesoramiento es en la propia ortopedia, pues es ahí donde se va a ver al paciente y se va a realizar una correcta valoración de sus características y sus necesidades acotando los criterios de elección del producto final de forma personalizada.
