La escara o úlcera por presión es uno de los mayores problemas en pacientes encamados o pacientes con movilidad reducida. Las personas que corren más riesgo de padecer úlceras de decúbito son las que tienen una enfermedad que limita su capacidad de cambiar de posición o las que pasan la mayor parte del tiempo en una cama o una silla.
La mayoria de las úlceras por presión son evitables, simplemente requiere de prevención, en este blog y en próximos os daremos una serie de consejos que desde L3 Ortopedia consideramos imprescindibles y que os ayudaran a que estas no aparezcan y de esta forma hacer que el paciente gane en calidad de vida.
Las áreas del cuerpo alrededor de huesos que sobresalen tienden a ser más propensas a las escaras que las áreas con más grasa.
– Coxis o glúteos
– Escápulas y columna vertebral
– Parte trasera de los brazos y piernas
– Parte trasera o laterales de la cabeza
– Omóplatos
– Talones, tobillos y la piel detrás de las rodillas
3 factores principales:
• Por presión: la inmovilidad causa presión constante en una zona del cuerpo e impide que la sangre circule. Los tejidos no reciben oxígeno y nutrientes y pueden morir en esa zona, produciendo la lesión.
• Por fricción: el contacto de la piel con la ropa de cama o del paciente, o con pañales, especialmente si la piel está húmeda, puede producir esta lesión.
• Por rozamiento: al rozar con una superficie, por ejemplo, al deslizarse en la cama o de la cama a la silla se puede lesionar la piel en zonas vulnerables.
> Mover al paciente con frecuencia.
> Usar cojines y colchones antiescaras o férulas para evitar la lesión por presión.
> Evitar levantar la cama más de 30 grados para evitar el deslizamiento sobre el coxis.
> Inspeccionar, limpiar y secar la piel con frecuencia.
> Aplicar cremas o aceites protectores indicados por el médico.
> Dieta rica en proteínas.