Las barreras arquitectónicas son todos los obstáculos que nos encontramos para llegar, acceder o moverse tanto en zonas urbanas como dentro de los edificios.
Tipos de barreras arquitectónicas
Existen diferentes tipos de barreras arquitectónicas:
- Barreras arquitectónicas urbanísticas (BAU).Son las localizadas en vías y espacios libres de uso público. Algunos ejemplos son: aceras estrechas o con desniveles, bordillos sin rampa entre la acera y la calzada, ausencia de aparcamiento reservado para personas con movilidad reducida…
- Barreras arquitectónicas de edificación (BAE). Son las que encontramos en el interior de los edificios (públicos o privados).Por ejemplo: el acceso al edificio no dispone de rampa o es muy pronunciada, puertas estrechas o giratorias, suelos resbaladizos o con alfombras en mal estado, mostradores en comercios o recepciones demasiado altos…
Aquí destacamos las barreras que son más comunes en el día a día de una persona usuaria de silla de ruedas, las de las viviendas particulares. La ausencia de un ascensor o que este sea de reducidas dimensiones dificultan en muchos casos que la persona pueda salir de su domicilio, en estos casos recomendamos el uso de una silla salvaescaleras, una oruga o una plataforma sube escaleras que permita la movilidad de las personas con discapacidad, productos de los que hablaremos en próximos blogs. También encontramos dentro del domicilio otras barreras como puertas estrechas, interruptores o enchufes muy altos, muebles que dificultan el paso, cuartos de baño sin adaptar…
- Barreras arquitectónicas de transporte (BAT). Son las que impiden o dificultan a personas con discapacidad el uso del transporte público. Transportes no adaptados a sillas de ruedas o sin anclajes de seguridad, autobuses sin plataforma elevadora, estaciones de metro no acondicionadas… son algunos ejemplos de este tipo de barreras.
- Barreras de comunicación (BC). Son las que afectan a las personas con discapacidad visual. Estas consisten en la ausencia de señalización en Braille, obstáculos en las zonas de paso, semáforos sin avisador acústico…
En la Ley 51/2003 se recoge todo lo referente a igualdad de oportunidades, no discriminación y accesibilidad universal de las personas con discapacidad, y obliga a eliminar los obstáculos que impidan o dificulten su plenitud y facilitando realizar actividades cotidianas.
